Ilmo. Sr. D. Natalio Bayo Rodríguez

Épila, 10-V-1945. Pintor, grabador e ilustrador. El dominio del dibujo es fundamental para una obra con la línea como elemento aglutinante. A 1969 corresponde un breve período con la figura y el caballo como temas dominantes.

En 1970 se interesa por una neofiguración mediante figuras corpulentas dentro de una crítica social. Aparece la paloma, que más tarde tendrá un destacable protagonismo. Su fascinación por el Renacimiento italiano motiva que aparezcan figuras masculinas y femeninas emparentadas con dicha época. Figuras que flotan en el espacio o que se recortan sobre fondos que contrastan por su color.

A dichas figuras integra bolsas y ropajes que dan a la obra una destacable atracción. Al mismo tiempo, la paloma adquiere un gran protagonismo como símbolo de libertad, siempre recordando que estamos a principios de los setenta.

Sus figuras, de gran corpulencia salvo las femeninas, se inscriben durante los ochenta en primeros planos o en espacios, a las que añade dispares elementos que configuran un matiz surrealista. En esta línea cabe recordar la serie sobre la arquitectura y, hasta cierto punto, la realizada sobre San Jorge y el dragón.

Desde 1986 el desnudo, tanto en espacios interiores como en exteriores, adquiere un singular protagonismo, que puede combinar con elementos sorprendentes de gran sugestividad. Un realismo que da paso a la serie sobre los caballos desde mediados los noventa.

Su obra gráfica, iniciada en 1971, mantiene los temas comentados. Como una excepción conviene recordar la serie de trece grabados, 1996, basada en Los caprichos, que evoca a Goya pero incorporando sus peculiares figuras, las cuales se integran con total exactitud.

Fuente: GEA

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